La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo. Es la capa exterior del organismo, el tejido que protege a lo que hay dentro de la intemperie, y es la parte de nuestro cuerpo que asociamos con el sentido del tacto. Resulta importante tener claras las formas de cuidar la piel, y si es natural mejor. La importancia de ello no está en la belleza que pueda o no aportar una piel sana. La piel sana no suele dar sensación de picor, escozor, ni dolor. Es decir, permite vivir de forma cómoda y tranquila.
Hay varias cosas que podemos hacer para mantener una piel saludable. Algunas son cosas de origen natural que podemos acoplar a nuestra rutina diaria. Y otras, sencillamente están demostradas ser de gran ayuda para la piel. De cualquier manera, éstas son las formas de cuidar la piel.
Usa bloqueador solar
De acuerdo a la Skin Cancer Foundation, toda persona mayor de los seis meses de edad debería usar protección solar diariamente. La fundación también advierte de que un bloqueador debería tener un Factor de Protección Solar (FPS) de al menos 15 para prevenir el enrojecimiento de la piel. El bloqueador solar sirve para bloquear los rayos ultravioleta (UV), los cuales están divididos en UVA, UVB y UVC. De acuerdo a la American Cancer Society, los rayos que nos encontraremos con mayor frecuencia son los UVB y UVA. Los UVA son de onda larga, por lo que pueden escapar con mayor facilidad de la capa de ozono. Los UVB, de onda media, son capturados por la capa de ozono, aunque también son capaces entrar a la atmósfera. Los UVB —al tener la onda más corta que los UVA— tienen mayor energía, por lo que hacen mayor daño a la piel y son un contribuyente más poderoso para que ocurra el cáncer de piel. Sin embargo, no existe el rayo UV seguro. Ante esto, hay que usar bloqueador solar.
El Aloe Vera ayuda a calmar la piel y a hidratarla
De acuerdo a Oxfam Intermón (representación española de Oxfam Internacional), el aloe vera —que podemos encontrar en la sábila— es capaz de penetrar las tres capas de la piel. Estas tres capas son la epidermis, dermis e hipodermis. Ello hace que sus principales propiedades puedan actuar de forma profunda. Sus beneficios son la hidratación que proporciona, el antienvejecimiento y su capacidad de oxigenar las células de la piel. Todo esto gracias a la presencia de Vitaminas A, B, C, mucílagos, zinc, ácido fórmico, aceites, ácidos grasos y aminoácidos.
Con todo este cúmulo de sustancias, los beneficios del aloe vera no se limitan únicamente a lo mencionado anteriormente. Todas ellas dan a esta planta propiedades astringentes, antiinflamatorias y bactericidas. Lo cual hace que sea una planta muy popular en la cosmética natural. Si se buscan formas de cuidar la piel de forma natural, hay que tener al aloe vera como el primer aliado.
Agua de rosas, un cosmético de uso desde la antigüedad
El agua de rosas, que es un producto hecho a base del aceite esencial que se extrae de las rosas, es también un cosmético naturarista. La revista especializada en conservación y sostenibilidad alemana, Utopia, reseña que esta tónica contiene propiedades antiinflamatorias, mantiene un pH balanceado y conserva la piel tersa, promueve la circulación de la sangre. Además, es antibacterial, controla los niveles de grasa en la piel y elimina el exceso de suciedad que se acumula al estar expuesta a la cotidianidad.
Entre los componentes que aporta el agua de rosas a nuestra piel están la vitaminas B y C, pectina (una sustancia gelificante y permite que el agua en las células tenga mayor adhesión) y taninos. El agua de rosas, además, se pueda hacer en casa y en Internet se pueden conseguir guías para producirla.
La alimentación también ayuda significativamente a la piel
Por supuesto que al hablar de formas de cuidar la piel de forma natural, se tiene que mencionar la alimentación. Desde el Skin Health Institute de Australia recomiendan varias cuestiones a nivel de nutrición para cuidar la piel. Una de ellas es el consumo de nueces y semillas, las cuales tienen grasas que la piel necesita, y Vitamina E —antioxidante que combate el daño de los radicales libres que causan el envejecimiento de la piel—.
Los moluscos, ostras y el salmón contienen omega-3 —que reduce la inflamación y nutre la piel—. En general, los pescados aceitosos tienen estos beneficios, de acuerdo al mencionado instituto australiano. La recomendación es que hay que comerlos por lo menos dos veces a la semana. Las zanahorias, por su parte, contienen mucho beta-caroteno. Esta sustancia actúa como antioxidante por sí sola, y también puede ser sintetizada en vitamina A —que repara la piel y la mantiene saludable—. Por último, se aconseja el consumo de vegetales de color verde oscuro (como la espinaca), tés, frutos del bosque, aguacate y kiwi para tener una piel saludable a través de la alimentación.
Las propiedades cicatrizantes de la miel
Un estudio que apareció en el International Journal of Morphology llamado “El rol de la miel en procesos morfofisiológicos de reparación de heridas” que se puede encontrar en la biblioteca online Scielo.org, explica que la miel tiene propiedades cicatrizantes. Ella informa de que diferentes estudios han demostrado que la miel promueve la angiogénesis (formación de nuevos vasos sanguíneos), la granulación y la epitelización.
Un auto masaje para ayudar a la piel
Los masajes ayudan a la piel, estimulando con presión la superficie cutánea. De acuerdo a la revista médica Medicalopedia, los automasajes periódicos son recomendables. Uno de los beneficios es que promueven la liberación de toxinas a través de la piel. También se favorece la circulación, para que los glóbulos rojos “entreguen” oxígeno a las células de la piel.
La piel hay que cuidarla, y no hacen falta productos industriales salvo que haya una condición específica. Hay formas de cuidar la piel de forma natural, y lo natural a veces es lo más conveniente y económico.
